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Cada año, más de 1.000 miembros de todo el mundo vienen a los brazos de la Jerusalén celestial, como nubes, como palomas a sus nidos; cada grupo de visita consta de 200 a 300 miembros. Ya que un gran número de miembros del extranjero visitaban Corea cada año, se requería un lugar para alojarlos y al mismo tiempo proporcionarles educación bíblica. Justo a tiempo, se estableció un instituto auxiliar de la Iglesia de Dios en una zona cercana al edificio de la Gran Asamblea (localizado en Bundang-gu, Seongnam-si). Este es el Instituto de Dongbaek, que está localizado en el distrito de Dongbaek, ciudad de Yongin.

El 15 de diciembre, se realizó el culto para la Ceremonia de Inauguración del Instituto de Dongbaek, al que asistieron más de 500 miembros del personal pastoral de todo el mundo. La Madre compartió la alegría de realizar la ceremonia de inauguración por el recientemente establecido Instituto de Dongbaek con los profetas que trabajaron duro para el evangelio. Ella agradeció al Padre por permitirles un encuentro significativo para que recibieran la sabiduría para guiar al rebaño de Dios por medio del Espíritu Santo, y después predicó personalmente un sermón titulado “Todo lo que el hombre sembrare, eso también segará”.

La Madre les pidió repetidamente que despertaran y que predicaran rápidamente las buenas nuevas de salvación –la pascua, la manera de comer el alimento de la vida eterna– a todas las personas en esta época tan triste y llena de noticias de desastres en todo el mundo. A través de la parábola del hombre rico y el mendigo Lázaro, los inspiró diciendo: “En lugar de perseguir una cómoda vida física, olvidando la esperanza celestial, traten de vivir con templanza y humildad, soportando las dificultades por el evangelio, para salvar al menos un alma más, a fin de que todos ustedes puedan recibir consuelo y bendiciones del Padre en el reino de los cielos”. Luego la Madre los bendijo para que cosecharan el fruto del Espíritu Santo, predicando ansiosamente el evangelio con el amor del Padre, que vino voluntariamente a esta tierra dos veces para buscar a sus hijos, y con el corazón del buen samaritano que dio todo lo que tenía para salvar la vida de un hombre moribundo (Gá. 6:6-8, Lc. 16:19-25, Ro. 8:16-18, Ap. 22:12).

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El Instituto de Dongbaek dio su primer paso como una institución para el evangelio, que proporciona oportunidades para aprender la voluntad del Espíritu Santo y cultivar el carácter de un buen cristiano. El edificio principal del instituto tiene cuatro pisos; consta de dos salas de reunión con capacidad para 500–600 personas, 10 salas de lectura, un comedor y una sala de descanso. El edificio anexo de tres pisos conectado al edificio principal, se usa como alojamiento. El Instituto de Dongbaek, que ofrece condiciones ideales para el estudio bíblico, será una graciosa cuna del evangelio; cualquiera que visite el instituto recibirá plenamente el Espíritu Santo y proclamará el amor del Padre y la Madre a todo el mundo.